¿Estar a dieta=pasar hambre?

Estás acostumbrada a que, cuando te quieres cuidar o quieres bajar de peso, lo normal, es que pases hambre y te parece hasta bueno, porque si pasas hambre "quemas"
Además, aguantas el hambre como una campeona porque piensas que cuando te subas a la báscula habrás perdido un montón. El problema es que normalmente la ecuación pasar hambre no suele ser igual a bajar de peso, quizá las primeras semanas si, pero luego ya no. Y lo peor de todo es que, en el momento que dejas de pasar hambre, recuperas todo lo que habías perdido y hasta quizá algún kilo de propina y entonces ¿qué haces? frustrarte, desesperarte y tirar la toalla, porqué total, estás haciendo un esfuerzo enorme, pasando hambre, privándote de aquello que te gusta y encima lo poco que pierdes lo recuperas enseguida.
Pues no, lo normal no debería ser pasar hambre, y no solo no debería ser normal, sino que además es peligroso. Para empezar quiero que entiendas que tu cuerpo no entiende que tú quieres adelgazar, somos mucho mas primitivos y nuestro organismo solo sabe si tiene o no para comer (si hay caza o no hay caza)
Te pongo un ejemplo: tú comes cada vez que tienes hambre (ojo! comida sana) o cada 2-3 horas, por lo tanto, tu lado más primitivo entiende que vives en una zona en la que hay mucha caza y no va a necesitar tantas reservas, así que, almacena menos y quema más porque sabe que cada vez que lo necesita come. Ahora el caso contrario, te pasas todo el día con hambre y haces sólo 2 comidas al día. A estas comidas vas a llegar hambrienta total, vas a comer lo primero que pilles (y probablemente no lo más sano), comes deprisa y sin masticar lo que toca (porque estás hambrienta). Tu organismo entiende que vives en una zona con poca caza y no sabe cuándo va a ser la próxima ingesta, por lo tanto, almacena todo lo que puede y trata de quemar lo mínimo porque necesita reservas para mantenerse lo mejor posible.
¿Ves lo que pasa? Tu cuerpo, tu naturaleza no entiende de dietas, ni de modas ni de michelines. Entiende de supervivencia.
Además, cuando pasamos muchas horas sin comer, se activan una serie de alarmas y podemos tener graves problemas de salud. A corto plazo lo que podemos sufrir es un desmayo, bien por una bajada de la tensión sanguínea o bien por la disminución del azúcar. A la larga serían mucho peores, nuestras células se alimentan de glucosa, por lo tanto, al acabar las reservas de glucógeno (azúcar), empezaría a quemar tejido graso y por último tejido muscular. Es decir, azúcar, grasa y músculo.
Las reservas de glucógeno se agotan a las 6 horas de ayuno y empiezas a quemar grasa y nuestro organismo entra en lo que yo llamo "modo supervivencia" es decir, tratando de quemar lo mínimo posible para pasar esta fase lo mejor que pueda. A los 3 días, las reservas de grasa se agotan y el organismo empieza a buscar las proteínas existentes en el músculo para abastecerse de energía. Estos procesos crean una serie de residuos provenientes de este modo de obtención de energía como los cuerpos cetónicos y el amoniaco. Estos desechos deben ser metabolizados por hígado y riñón, con lo que estamos sobrecargando estos órganos. Además el cerebro empieza a tener falta de alimento y el hipotálamo (que es el que se encarga de regular el gasto energético) se pone en modo de ahorro total de energía, por lo que ni siquiera tiene porqué ser un método eficaz, puesto que tu cerebro va a tratar de consumir lo que ingiera, no más.
Todo esto provoca mal humor, dolor de cabeza, mareos, nauseas y puede provocar una sobrecarga renal y hepática con todo lo que ello conlleva.